Seguridad para el sector de la infraestructura y obras civiles. Es el tema del artículo de la periodista Patricia Bejarano, que reproducimos a continuación.
Son unas de las actividades de mayor dinamismo en la economía colombiana, a las cuales se destinan los más altos rubros de inversión, impactando la generación de empleo y la productividad de las cadenas de suministro de proyectos de ingeniería, consultoría, construcción, interventoría, procesos de importación y consumo de materiales.
Su estrecha relación con la creación de infraestructuras básicas, asociadas a la expansión del comercio y a una mayor oferta de bienes y servicios, como puentes, vías férreas, túneles, puertos, carreteras, plantas de energía eléctrica, hidroeléctricas y termoeléctricas, así como sus correspondientes líneas de transmisión y distribución, presas, obras de irrigación, construcciones comerciales e industriales, instalaciones telefónicas, plantas petroquímicas, refinerías y perforación de pozos, entre otros, hace que este sector movilice en forma directa la renovación urbana, la infraestructura social y el transporte.
Sin embargo, los riesgos y las amenazas de estas estructuras urbanísticas, en temas de seguridad, son contundentes. En estos tiempos de vulnerabilidad, es hora de replantear las estrategias de seguridad implementadas, en cada una de ellas, para mejorarlas a través de modelos operativos de prevención y protección altamente calificados.